Las adicciones no solo dañan a quienes las padecen, sino también a quienes les rodean, sobre todo el círculo familiar y de amistades. La adicción a la cocaína puede convertirse rápidamente en una situación dolorosa y desgastante para quienes están alrededor de la persona afectada. Hay problemas, discusiones, tensión creciente, incluso violencia.

Siempre será imprescindible pedir ayuda profesional para tratar las adicciones, además de aplicar los siguientes consejos para mejorar la convivencia:

No estés todo el tiempo vigilándole

Al vivir con un cocainómano y vigilarle todo el tiempo, no sirve de gran cosa. La adicción a la cocaína es una enfermedad compleja y será difícil que controles cómo se desenvuelve la persona.

¡No le des dinero!

Esto es muy difícil de hacer, pero necesario. Lo más probable es que lo utilice para comprar más coca. Es muy importante mantener vigilados sus movimientos de dinero para evitar que los utilice para adquirir mas droga.

Evita sermonear con material educativo

Otro error común es hacer que mire vídeos, pelis o que escuche podcasts sobre adicciones. No va a “hacerle clic” y cambiará de la noche a la mañana, no funciona así.

Evita contenido sobre consumo de drogas

Si en la programación o película aparecen imágenes de consumo, mejor cambia a otra cosa. Esto incluye cualquier tipo de publicidad “inofensiva” en prendas de ropa o de uso cotidiano que incluya imágenes sobre consumo de cocaína u otra droga.

Trata de mejorar el entorno

A veces el orden, la limpieza, la ventilación, el cambiar la disposición de los muebles, favorece la convivencia con el cocainómano.

Evita discutir

Es verdad que, al vivir con un cocainómano, las discusiones son altamente frecuentes. Pero si puedes evitarlas, déjalo así. Por otra parte, ten en cuenta que las drogas afectan el carácter y la personalidad del adicto, así que haz lo posible por evitar tomar sus comentarios de forma personal.

No juzgues mirando al pasado

Es muy fácil estar señalando todo el tiempo que antes era “mejor persona” (atleta, estudiante, trabajador, padre/madre de familia, hijo, hija, etc.). Esto solo crea un círculo de discusión que no llega a buen fin.

La vida sigue: tu vida sigue

Una cosa es que ayudes a quien padece una adicción, y otra muy diferente que vivas su vida y su situación. Tienes una vida, tienes actividades, amistades, aficiones, más familia… ten siempre una red de apoyo para que te conforte y esté contigo.

No es tu culpa

Al vivir con un cocainómano, es fácil pensar que algo hiciste mal y que es tu culpa que esté así. Esto puede hacer que aceptes incluso maltrato de su parte. No tienes la culpa y sí mereces ser feliz. Busca ayuda: no puedes hacerlo todo por tu cuenta.

NO-A: Acude a nuestro centro de atención de adicciones

Es cierto que el cocainómano o adicto debe dar el primer y fundamental paso reconociendo su adicción. Pero en el ínter, lo que puedes hacer es acudir a un centro de adicciones. En No-A ofrecemos una opción no solo para atender adictos, sino a su familia y seres cercanos.

Sabemos lo difícil que es para ti y para ellos vivir con un cocainómano, por eso ofrecemos un plan integral que incluye desde terapia psicológica (individual, en grupos, por supuesto familiar). Incluimos mindfulness y otro tipo de terapias para superar esta adicción. No estás solo: te acompañamos a ti y al paciente en todo el proceso. Contáctanos mediante nuestra web o llama al 627 11 15 91.