La estrategia de cambiar de hábitos para dejar el alcohol es básica para tener éxito en este empeño y la primera recomendación en nuestro centro contra adicciones en Valencia. Incluso, se considera que el alcoholismo es el resultado de la suma de hábitos nocivos. En buena medida, corregir estas costumbres permitirá distanciarse de la ingesta de bebidas alcohólicas.  

Atender a un paciente alcohólico implica entender las causas de su adicción. Por lo general, cuando estas causas son tratadas; la tendencia a beber disminuye. Hay que considerar que el alcohol es una sustancia muy común y accesible. Existe presión social para su ingesta en fiestas y eventos sociales e incluso está bien visto socialmente. Igualmente, quienes padecen de estrés o depresión suelen beber alcohol para distanciarse de la realidad, lo que agudiza el problema pues el alcohol es un depresor.

Cambiar hábitos que desencadenan el alcoholismo 

Los hábitos que catapultan el alcoholismo son variados. Suelen ser muy frecuentes en nuestra sociedad, pero pasan inadvertidos. Muchas veces, hasta son protocolos “socialmente aceptados”. Veamos una lista de ejemplos: 

• Se recomienda alejarse de personas, o grupos, que alientan al consumo de bebidas alcohólicas. Pueden ser: familiares, amigos, compañeros de trabajo, vecinos, etc. 
• Cambiar la costumbre de beber “una copita” los fines de semana. Quien padece alcoholismo, no se queda en solo una copa; sino que bebe sin control. 
• Cuidado con las celebraciones: los cumpleaños, las bodas, los fines de año o festividad por algún logro propio o alguien más. Es normal brindar en tales casos, pero es necesario no abusar de la bebida. 
• No tener bebidas alcohólicas en casa. Es una tentación fuerte: en cualquier momento de depresión, rabia o alegría es factible destapar una botella y empezar a beber.  
• Decir sin pena: “Yo no bebo”. Hay un tabú respecto a no beber. La gente se mofa de alguien que no consume alcohol. Resulta perentorio aceptar esto sin caer en presiones sociales. 

• Cambiar rutinas por actividades que no impliquen beber alcohol. En vez de ir a un bar, es mejor hacer una caminata o hacer ejercicio. 
• Tener una vida más tranquila, con menos estrés. Muchas personas usan el alcohol como modo de escape de los problemas cotidianos. 

La opción de cambiar de hábitos para dejar el alcohol suele conllevar un nuevo estilo de vida. El alcohólico adapta su existencia al uso de esta sustancia. Por ende, se requiere cambiar el modo de existir. Vivir una existencia donde el alcohol ni está presente ni es necesario. ¡Esa es la mejor manera de abandonar esta adicción!